29 de octubre
Mi mente, mi cuerpo y mi alma son fuertes y resilientes.
Mi mente, mi cuerpo y mi alma son fuertes y resilientes.
Este momento de ansiedad no define quien soy.
Respiro profundo y reconozco lo que está bien en mí.
Puedo tener un mal día e igual vivir una vida hermosa.
Respiro más lento y suavizo mis sensaciones.
Respondo a las situaciones estresantes desde un lugar de calma.
Si estoy respirando, hay mucho más yendo bien que mal en mí.
No puedo controlar todo lo que pasa, pero sí puedo controlar mi respiración.
Merezco soltar todo lo que me causa ansiedad.
Me permito abrir espacio para la calma.