23 de octubre
Si estoy respirando, hay mucho más yendo bien que mal en mí.
Si estoy respirando, hay mucho más yendo bien que mal en mí.
No puedo controlar todo lo que pasa, pero sí puedo controlar mi respiración.
Merezco soltar todo lo que me causa ansiedad.
Me permito abrir espacio para la calma.
Siento mis dos manos y reconozco que estoy a salvo.
Confío en mi fortaleza interior. Sé que puedo con esto.
Inhalo y siento mi cuerpo. Exhalo y me relajo.
Estoy a salvo en este instante. La tierra me sostiene.
Reconozco que estoy viviendo este momento doloroso, pero sé que lo superaré.
La sensación de ansiedad no es el final de la historia.